Durante el verano, y sobre todo durante las olas de calor como la que vamos a sufrir esta semana, las víboras pueden comenzar a moverse para buscar refugio en zonas más confortables para ellas, teniendo en cuenta que los expertos señalan que estos reptiles están amenazadas por el cambio climático y por la fragmentación de sus hábitats.
Y nuestros jardines, con agua, alimentos y zonas seguras para refugiarse, puede ser una estupenda opción para que estos reptiles se protejan del calor. Para detectar la presencia de estos reptiles venenosos, hay una serie de señales que pueden delatarles y que te ayudarán a que no te sorprendan.
Cómo detectar la presencia de víboras en el jardín
Para empezar, hay que señalar que cuando una víbora ataca es porque se siente amenaza. Puede sentirse arrinconada, o que tú metas la mano en una zona donde esté refugiada y te muerda para defenderse. Por eso es importante detectar su presencia en casa o en el jardín.
En este sentido, la primera señal que encontrarás son sus huelas. Aunque las víboras pueden saltar de árbol en árbol, lo cierto es que la mayor parte de sus desplazamientos los realizan deslizándose por el suelo. Por eso, si ves en la tierra de tu jardín huellas en forma de"S", es muy probable que tengas una víbora cerca.
Además, las víboras también dejarán excrementos. Estos pueden recordar al de los pájaros, aunque suelen ser alargados y de mayor tamaño, presentando un componente líquido de color blanco amarillento que contiene urea, un compuesto químico que se encuentra principalmente en la orina, el sudor y la materia fecal de muchas especies.
Otra señal pueden ser la muda, la piel seca que dejan atrás su piel al renovarla, o los ruidos al desplazarse. Aunque la víbora suele ser muy silenciosa, estos reptiles pueden generar ruido al moverse si está tratando de huir por la presencia de mucha gente o de animales que puedan ser una amenaza para ellas.
Qué hacer si detectas una víbora en casa
En caso de que sospeches que hay víboras en el jardín de tu casa, lo principal es mantener la calma y extremar las precauciones con niños y mascotas, manteniéndolos alejados de las zonas en la que crees que pueden esconderse. A los niños, hay que educarles para que no intenten tocar ni acorralar a estos reptiles.
Si ves una víbora, es muy importante no acercarse a ella, ni intentar matarla o atraparla. Si se ven amenazadas, responden de manera agresiva. Una vez detectada, lo mejor es llamar a profesionales en el control de plagas para que puedan poner remedio al problema evitando riesgos innecesarios para ti y para el animal.
Además, para evitar su presencia, deberás retirar montones de madera, escombros y cualquier cosa que pueda servir como refugio. También es importante mantener corto el césped y los arbustos bien podados, para detectar pronto su presencia y que ellas no se sientan tan seguras en tu jardín.
Fotografía | Andrea Bohl en Pixabay
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