En cuanto vi estos taburetes de diseño japonés, me encantaron, me parecieron muy cómodos y alegres para los cuartos de los niños. Las cuatro patitas de madera, el asiento de piel e incluso el rabito que cuelga me hizo gracia.
Está claro que para gustos, los colores, ya que al llegar mis enanos del colegio y ver lo que estaba escribiendo me llamaron “rara” y que les parecía muy “gore” sentarse en animales decapitados, y uno de sus amigos me preguntó si cuando era pequeña leía historias de tramperos americanos, porque parecían los gorros que llevaban.
Básicamente, se trata de un taburete con un soporte robusto para el asiento, forrado de piel sintética, con cuatro patas dispuestas a soportar lo que les echen.
Un mueble artesanal, con una bonita madera, bien pulida, que termina en unas graciosas patitas, aunque claro está, el elemento principal de todo el diseño es obviamente el componente peludo que cubre el asiento, y también se extiende como una cola por el extremo posterior.
La piel de imitación tiene distintos modelos diferentes variedades que a su vez corresponden a los diferentes tamaños de las especies.. Por ejemplo, hay la “piel del lobo”, cubre un taburete grande, mientras que hay la “piel de zorro” viene con los modelos más pequeños.
¿Qué os parecen los “animal stool”? ¿Os gustan o también os parecen ovejas decapitadas?
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