Aunque pensemos que tenemos la casa como una patena, lo cierto es que siempre hay partes y elementos de la casa que no limpiamos como deberíamos. Los enchufes e interruptores, los rodapiés o las manivelas son algunas de las cosas que no limpiamos con la frecuencia con la que deberíamos. Pero al margen de estas pequeñas piezas, hay un textil del que nunca nos acordamos y que acumula polvo y suciedad: hablamos de las cortinas.
Frente a la limpieza habitual textiles como las alfombras, las sábanas o las fundas nórdicas, lo cierto es que las cortinas se lavan muchas menos veces de los que se debería, pese a que acumulan polvo, los ácaros, el humo, la grasa o las manchas. E incluso pueden llegar a coger olor provocando una atmósfera mucho más pesada en casa.
Además, hay que tener en cuenta que unas cortinas llenas de polvo pueden provocar alergias, asma o incluso irritación de ojos y garganta. Por eso, es importante lavarlas de forma regular, sabiendo cómo hacerlo de forma correcta según el tejido y el grado de suciedad.
Cada cuanto hay que lavar las cortinas
Una vez dicho esto, la pregunta del millón es... ¿cada cuánto tiempo hay que lavar las cortinas para mantenerlas limpias? Según María Fernández, una instagramer especializada en orden, limpieza y hogar con más de 1,3 millones de seguidores, explica que lava las cortinas cada dos meses para mantenerlas libres de polvo y con buen olor.
A la hora de lavarlas, esta experta en limpieza utiliza un programa a 40º, poniendo la lavadora a 400 revoluciones para no tener que plancharlas y que se sequen directamente en la barra con el peso del agua.
Consejos para lavar las cortinas
Más allá de la frecuencia que explica esta experta en limpieza y hogar, hay otros consejos que deberíamos tener en cuenta a la hora de lavar las cortinas de casa.
- A la hora de limpiar las cortinas, lo primero que hay que hacer es revisar la etiqueta para saber de qué material están hechas y a qué tipo de lavado hay que someterla.
- Para empezar, deberías evitar el suavizante, ya que deja una película que atrapa la suciedad y el jabón, lo que provoca que las cortinas se ensucien más rápido. Además, también reducen la capacidad que tienen las cortinas para filtrar el aire de forma correcta.


- En general, hay que diferenciar entre dos tipos de lavado: a máquina o a mano. El lavado a máquina es más práctico y rápido, pero solo se puede aplicar a las cortinas de tejidos resistentes como el algodón o el poliéster. Para lavar las cortinas a máquina, hay que seleccionar un programa corto para prendas delicadas y utilizar agua fría junto a un detergente suave. Para las cortinas blancas, siempre que sean de un material resistente, se puede usar un poco de lejía. Además, es importante elegir un centrifugado de baja intensidad, para poder quitar el exceso de agua sin dañar los tejidos.
- El lavado a mano es más costoso, pero es el que hay que utilizar para cortinas de tejidos finos como la seda o el lino si quieres lavarlas en casa. Para lavarlas mano, hay que dejar las cortinas en remojo durante una hora como mínimo en agua fría. Pasado ese tiempo, deberás frotarlas con cuidado para eliminar la suciedad más incrustada. Después, hay que aclarar con agua limpia hasta que veamos que no sale más jabón entre las fibras. Para quitar el exceso de agua, puedes meter la cortina la lavadora con el programa de centrifugado más bajo.
- Una vez que has acabado de lavar las cortinas, puedes tenderlas al aire libre para que el peso de la propia cortina acabe con las arrugas. Si la barra no es de metal, también puedes colgarlas directamente en su sitio.
- Además, para mantener las cortinas limpias entre lavado y lavado, es importante aspirarlas o limpiar el polvo con un cepillo aspirador o con un plumero cada dos semanas. También puedes sacudirlas en el exterior para eliminar el polvo de forma rápida y sin tener que lavarlas.
¿Qué tipos de cortinas se deben lavar?
La mayor parte de las cortinas de algodón se pueden lavar en casa a máquina con agua fría y detergente suave en un ciclo delicado. En el caso de las cortinas de poliéster, se pueden lavar a máquina con agua fría o tibia, evitando siempre altas temperaturas. Además, las cortinas transparentes también suelen ser lavables, aunque son delicadas, por lo que los ciclos suaves y el agua fría son claves para evitar daños.
En cambio, es importante lavar en seco de manera profesional las cortinas de seda, las que son de terciopelo o las que están muy forradas o llevan muchos adornos. También es necesario lavar de esta manera las cortinas elaboradas con mezcla de lanas, ya que pueden dañarse o incluso encogerse.
Fotografía de portada | Collov Home Design en Unsplash, Deconovo en Unsplash
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