En una era donde las nuevas tecnologías forman parte de nuestra vida cotidiana, no hay semana que nos libremos de limpiar las pantallas. Ya sea del ordenador, de la televisión o de nuestro dispositivo portátil, estamos todo el día utilizando y toqueteando las pantallas que, si no sabemos cómo limpiarlas, pueden acabar rotas, con manchones en negro u otras marcas y características que descubren su mala forma de hacerlo.
Por ejemplo, los televisores y ordenadores modernos están equipados con pantallas LCD con una fina capa protectora que proporciona imágenes de alta calidad, reduce el deslumbramiento y mejora la reproducción del color. Un sinfín de ventajas que pueden convertirse en un inconveniente si no sabemos cómo limpiarlas de manera segura ya que parten de un revestimiento bastante sensible.
Por eso, a continuación te dejamos una serie de reglas y precauciones que has de llevar a cabo a la hora de limpiar estas pantallas para evitar dañar su revestimiento u ocasionar daños mayores que acaben con el buen funcionamiento de las mismas.
Reglas básicas para el cuidado de tu televisión
Dejando de lado reglas fundamentales como el cuidado de malos golpes o el contacto directo con líquidos, es importante tomar precauciones básicas antes de comenzar a limpiar nuestro televisión.
- Apaga el dispositivo. Si limpiamos la televisión con ella encendida, es más propensa a estropear su calidad de imagen y a aumentar el riesgo de electricidad estática. Además, el polvo y las manchas de los dedos y otras sustancias son más visibles cuando la pantalla está apagada.
- Utiliza materiales no abrasivos para evitar dañar la superficie que estamos limpiando.
- Evita un presión excesiva sobre la pantalla. De lo contrario, podrás dañar los píxeles, la calidad de imagen o distorsionar la claridad de la misma.
- Por supuesto, no apliques líquidos directamente en la pantalla. Esto puede provocar que entre humedad en su interior y se acabe deteriorando.
Pero como siempre, no solo importa la teoría, sino que también la práctica y puesta en marcha de lo conocido. Por eso, sabido esto, es fundamental el material que utilizamos para limpiar nuestras pantallas, primando el uso de paños de microfibra, toallitas especiales para pantallas y sprays o geles para mamparas que ayudan a eliminar las manchas más rebeldes sin dejas rastro de rayas o restos de suciedad.
Procedimiento de limpieza
Para una limpieza impoluta e impecable de tus pantallas, sigue estos tres pasos y verás como poco a poco notarás que tu dispositivo carece de polvo, manchas irritantes e incluso permanecerá como nuevo durante años.
- Primero quita el polvo de la pantalla utilizando un paño de microfibra totalmente seco. Para hacerlo, emplea movimientos circulares y delicados para evitar dañar o rayar la superficie.
- Después, si notas manchas, huellas dactilares o restos de suciedad en la pantalla, humedece una esquina del paño de microfibra en una solución para pantallas y frota suavemente la mancha sin presionar la superficie.
- Por último, después de la limpieza húmeda, limpia la pantalla con un paño de microfibra totalmente seco para eliminar la humedad restante y evitar rayones.
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